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trabajos de explotación dieron comienzo en 1893, estando la dirección de las minas motora circulando pero que sí daría lugar a que se fijara en el acervo popular gracias
encomendada al ingeniero Don Ángel Jimeno.
Dice la guía nº 9 del paquete de “Guías para conocer Laviana” (Excmo Ayto de La-
viana, Alto Proder II, 2009) que “dos hitos marcan la historia de Laviana, la fundación
de la Puebla, probablemente en el siglo XIII, y la inauguración, en 1890, de la primera
explotación minera del concejo, la establecida en Coto Musel”. Dos años después,
en 1892, se lee en una publicación de Madrid la siguiente noticia: “El empresario
Vasco Sr. Martínez de las Rivas ha constituido el coto minero que llaman MINA DE
LAVIANA, por estar en el término municipal de Pola de Laviana, ocupa una extensión
de 1.149 Hectáreas…”.
En el mismo año de la publicación del citado libro “Asturias Industrial” (1902), en-
contramos en “L’Echo des Mínes et de la Metallurgie” (Francia) la noticia de ha-
berse constituido en Paris una sociedad denominada “Charbonagges de Laviana”,
una sociedad de dos millones de francos para explotar un coto hullero en Laviana,
añadiendo que “la acertada dirección” corresponde al Ingeniero D. Juan Gandolfi
quien “a la solidez y elegancia de las obras ha añadido su interés por la vida y el
bienestar del obrero; teniendo además en proyecto la construcción de un pequeño
hospital, así como una casa-escuela donde los hijos de los obreros puedan educarse
e instruirse...”.
En 30 de mayo de 1900, se otorga escritura por la cual, según dice dos años des-
pués Rafael fuertes Arias “la activa y emprendedora sociedad denominada Crédito
Industrial Gijonés, adquiere la concesión de los ferrocarriles de San Martín-Lieres-Gi-
9
jón-Musel” . Es el nacimiento de la famosa línea que nunca llegará a ver una loco-
marqués de Mudela, Rivas, etc. A su muerte (Madrid 13-4-1913), su fortuna se tasaba en 16
millones de pesetas, siendo uno de los hombres más ricos de España. Entre sus propiedades
destacaba la finca de La Galea, de 157 hectáreas, en Guecho, uno de los parajes más
emblemáticos de la costa vasca. La familia fue perdiendo con los años las participaciones
en muchas empresas pero mantuvieron un especial lazo sentimental con las minas de Coto
Musel, rechazando en ocasiones suculentas ofertas (¿y animados quizá por la férrea voluntad
de su contratista Joaquín Velasco?).Añade el biógrafo que “aunque la compañía de Laviana
no pasaba de ser la 9ª empresa entre las que explotaban el carbón asturiano y la 17ª del país,
sus beneficios fueron tan sorprendentes que los herederos se mostraron reacios a vender. En
1915 se cifraron los beneficios en 1.125.000 pesetas y en 1918 superaron los 2.500.000, lo que
suponía nada menos que un 250 % sobre aquel capital social inamovible que se tomó como
referencia nada menos que hasta 1940. (“La disputada herencia de Coto Musel. La 1ª mina
del concejo de Laviana”, 2-12-2012, El Blog de Acebedo)
9 Rafael fuertes Arias, “Asturias Industrial”, 1902, p 61-62. Añade a esto Faustino Suárez Antuña,
2001 que en 8 de junio de 1901 se constituye en Gijón la Cía de los Ferrocarriles de San Martín- asturiana. En 1914 y 1918 la Charbonnages será intervenida judicialmente y un año
Lieres-Gijón-Musel, Soc Anónima que será filial del Crédito Industrial Gijonés. Su objetivo era,
citando la propia escritura de constitución, “la construcción y explotación de ferrocarriles,
establecimiento y explotación de talleres para la reparación y construcción de material de
ferrocarril y operaciones financieras de crédito y otras cosas”, añadiendo Faustino que los
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a la famosa tonada “Hay una línea trazada”. La línea, con un capital de 6,5 millones
de pesetas, se instituye como filial de dicho Crédito Industrial Gijonés. El autor de los
estudios y proyectos es don Felipe Valdés Menéndez, “persona de probada com-
petencia en la materia”. La línea de San Martín del Rey Aurelio a Lieres, tendrá 17,8
km de recorrido y pasará por Sotrondio, La Llave, Candanal, Suáres, Fresno y Lieres.
Desde ésta última localidad, el ferrocarril Lieres-Musel, de 34,4 km, enlazará La Co-
llada, Fano, La Bandera, Huerces, Marcos, Tremañes y El Musel. Podría haber nacido
en otro Musel (Coto Musel), pero no, no pensaba partir del coto minero lavianés. No
importa. Allí están el empresario vasco Don José Mª Martínez de Las Rivas y su inge-
niero D. Juan Gandolfi que también llevará las minas de hierro en Somorrostro y que
todo lo ha previsto. Gandolfi buscará salidas ingeniosas para sus carbones mediante
muy hábiles contratos con el Ferrocarril de Langreo, la sociedad que, a falta de “la
línea trazada”, seguirá monopolizando todo el transporte ferroviario hasta Gijón. A la
solidez y elegancia de las obras de Coto Musel, añade Gandolfi, como hemos dicho,
su interés por la vida y el bienestar de sus obreros.
Entre unos y otros documentos sabemos que la producción en el gozne entre los
siglos XIX y XX es del 65.000 toneladas/año de hulla de excelente calidad (grasa y
semigrasa), que lavan y clasifican en 4 lavaderos de patente alemana. Cuenta la
empresa con 350 trabajadores de los cuales 160 son de interior y 190 de exterior. Los
diferentes grupos de explotación se hallan unidos a la estación del FC de Langreo en
Laviana por 4 km de vía de 0,60 m de ancho (no confundir con la famosa Campurra,
que discurría por la carretera general, para servicio de las minas de Fradera y que
será en 1920 la primera locomotora que unirá Laviana con Rioseco).
El jueves 22 de diciembre de 1904 la mina Coto Musel se cobra el primer muerto que
hemos podido documentar. Se trata de José González Pérez, de 34 años, fallecido
en un pozo de la capa María del piso 1º. Según el acta de Policía Minera, la muerte
fue “por causas naturales”, pero a saber lo que se entendía por causas naturales.
El 1 de febrero de 1905 la Revista Minera da una noticia, que toma del francés
“L’Echo des Mínes et de la Metallurgie”, y que nos habla de la constitución en Paris
una sociedad denominada “Société Française des Charbonnages de Laviana” (en
ocasiones “Lovaina”, por error), que con un capital social de dos millones de francos
prevé explotar un coto hullero de 1.200 Ha en el cual también explota mineral de
cinabrio. Es ésta una extraña noticia que deberíamos rastrear pues es probable que
el yacimiento previsto fuera el de Riosa (no Ribota en ocasiones se lee), y el coto no
fuera nuestro Coto Musel sino el situado en el extremo opuesto de la cuenca central
planos del Proyecto, de fecha 20-11-1900, van firmados por el ingeniero de Caminos don
Eduardo de Castro (Archivo Gral de la Administac, Madrid) … fue aprobado por RO de 4-6-
1904 … tendría estaciones en La Llave … Los Artos … El Candanal …
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