Page 309 - Virgen del Camino
P. 309
de energía conmovedora que por aquel lugar se expandía a raudales. Igual
intensidad poseía la radio, que exigía buenas voces, mejores inteligencias y
redacciones aún y un sacrificio más al espacio lúdico convencional. El cine
de los domingos era en aquel tiempo, junto a un instrumento de cohesión
del día de asueto, un doble lujo: el de tenerlo en casa y el de poder disfrutar
todos de su interés formativo, que no pocas veces aquellos frailes lograban
rozar la perfección con algunos de los films que conseguían traer y rozar
incluso, inteligentemente, la censura que reinaba externa e internamente.
No cabe concluir este rápido repaso al microcosmos del Colegio
Apostólico de la Virgen del Camino sin aludir expresamente, lo habíamos
esbozado ya, al tesoro más preciado por todos y que propició un milagro, por lo
extraordinario, no por la falta de un esfuerzo casi sobrehumano, y a un tiempo
(página 364, FOTOS 896 y 897) incomparable. Me refiero, obviamente, al pleonasmo que hermanaban la
música y la Escolanía. Lo expreso así, porque estoy seguro de que la vocación
Con todo, no acaban aquí las innovaciones, más bien surge de esas de la cultura musical era aún mayor que su hija predilecta, la Escolanía, tal
sólidas fuentes la necesidad de que los alevines de los dominicos tengan vez el femenino más amado, pues el general apenas se barruntaba, salvo
la formación integral imprescindible, la praxis religiosa indispensable, pero en cada mente que caminaba a la pubertad. Que la música era la reina lo
también cuanta cultura complete ambas y el dominio de las innovaciones predicaba todas las mañanas el despertar general que permitía reconocer
en los nuevos modos del saber y quehacer humanos, que ese sacerdote desde muy pequeños a Haendel, Vivaldi o Albéniz, pero también en las
“predicador” va a tener que usar. Las propias imágenes que antes hermanas menores de la Escolanía, como la Rondalla o las propias clases de
contemplábamos dan fe de este proceso. Están extraídas, como todas, solfeo necesarias para aprender el lenguaje musical tan indispensable para
del Álbum, pero reproducen algunas páginas de la revista “Camino”, la ambas. Con todo, los ensayos, las obligaciones litúrgicas cada domingo
original Revista del Colegio, vehículo de expresión de su vida con el exterior, y fiestas religiosas en el Santuario, los conciertos en muchos lugares fuera
primordialmente con las familias de los colegiales y elaborada con el del recinto de La Virgen, aunque con su nombre, y la propia grabación de
protagonismo de los muchachos, que, con la debida ayuda y supervisión, un buen conjunto de discos provocaron tal intensidad de trabajo, tiempo
escribían, componían, dibujaban y maquetaban. Unos en mayor anonimato y pasión que debieron ordenar de modo singular la ordenación interna y
de su labor y los firmantes con su literatura eran tenidos, y ellos mismos así se desde luego la proyección de aquel colegio que ocupaba un trozo de tierra
reconocían, como los premiados de un continuo concurso, cada vez que en la fría paramera de la tierra leones. No se extrañe ningún lector actual que
su nombre aparecía rubricando el texto, porque, bien sabía, era preciso ser en la década de los 60, concretamente en 1967, bajo la dirección del Padre
valorado positiva y extraordinariamente a veces para recibir tal honor. “La Ángel Torrellas, aquella Escolanía viajara a Roma al Congreso Internacional
revista tuvo tres periodos por su diseño e impresión, en blanco y negro, al de los “Pueri Cantori”, actuando en el propio Vaticano y seleccionada por
principio; con colores planos en su etapa central, y con de fotos en sepia en la RAI, junto a los Niños Cantores de Viena, para su emisión. Éxito análogo
la tercera”, nos recuerda Lalo F Mayo en su texto glosando la foto 865 de la tuvo una década después, concretamente en el Congreso de Viena de
página 354. Claro que esa comunicación exterior se complementaba. para 1978, dirigida en ese momento por Baldomero López. Me importa subrayar,
los habitantes de aquella isla, con los “Tablones de noticias internas”, que junto a ello, para nuestro fin el armazón cultural que su labor construyó para
también exigían saber, algunas destrezas, propiciando el arte con algunos el proyecto humanístico del Colegio, que aquí venimos destacando y su
dibujos de los más distinguidos alumnos e incluso la llegada subrepticia de consecuencia fundamental en la profunda huella y sensibilidad imborrable
noticias del exterior. que imprimieron en quienes vivieron aquella inusitada experiencia. En no
pocos la voz se unía al ejercicio de aprender, ensayar y tocar en la Rondalla
Pero también el teatro, con sus largos ensayos y representaciones, obras
de teatro, preparación de días especiales, con sus diversas secciones de Anexa que participaba en conciertos conjuntos con la hermana Escolanía.
música, poesía, discursos... llenaba todo un universo creativo y movilizador
308 309